domingo, 18 de abril de 2010

Vidas de santos... y beatos


El milagro del Padre Hoyos

"El Padre Bernardo Francisco de Hoyos nació en Torrelobatón (Valladolid) en 1711 y falleció a los 24 años a causa de un tifus que le fulminó en catorce días, después de su ordenación sacerdotal y en el proceso de asunción del cuarto voto de obediencia al Papa que fija la doctrina jesuita..Se le atribuye el milagro después de su muerte, lo que le ha valido la beatificación, de curar en 1936 a una joven de 23 años, hija de unos agricultores del municipio salmantino de San Cristóbal de la Cuesta, que padecía un tumor intestinal de cinco kilos."

¡Qué fantástico! Hace un milagro después de muerto. Esto sí que es virtuosismo.

Este curica milagrero acaba de ser beatificado en Valladolid con una ceremonia de gran boato (para el beato). Siguiendo las indicaciones de Azotacuras, Antiklerical se une a esta ceremonia con la inolvidable canción "Quiero ser santa" del Zurdo y compañía.

4 comentarios:

Melastregues dijo...

Yo me he montao mi propia historia con el cura beato, la beata que imploraba al cura 300 años después y precisamente en el 36 y en Valladolid y el "tumor" de 5 kg. Pero es demasiado simple y no os la voy a contar.

Albino dijo...

Yo sí, el cura del pueblo dejó embarazada a la joven, la chica dio a luz; las monjitas (siempre hay en esos casos unas monjitas), dieron el niño en adopción a unos fascistas y le atribuyeron al milagro al beato.

Josefo el Apóstata dijo...

Je, je, ya sabía yo que le sacarías punta al milagro del "tumor abdominal"...

Isaak dijo...

El "tumor" se llama Carlitos y está "así" de alto. Estaba cantado, joder.