jueves, 26 de abril de 2012

Estamos de cojón con estos cretinos

“Los inmigrantes tenían familias más numerosas que las españolas y además solían padecer un estado de salud peor. Por añadidura, eran atendidos sin cotizar y sin ser legales con el empadronamiento como único requisito. Al cabo de unos meses, mi¬llones de inmigrantes no sólo estaban disfrutando de nuestra Sanidad, sino que además avisaban a sus parien¬tes de que podían venir a España a operarse. Los taxistas comenzaron entonces a descubrir pasmados que en el aeropuerto de Barajas los recién llegados del otro lado del Atlántico les indicaban como dirección no sólo la calle del hospital, sino hasta el número de planta. No fue sólo la Sanidad. Las ayudas de comedor y las becas comenzaron a ser copadas en las escuelas por los hijos de los inmigrantes, cuyos padres, al menos sobre el papel, siempre ganaban menos que los españoles. Por pri¬mera vez en la Historia, una nación pagaba impuestos crecientes para conseguir que se desplomara aún más su deplorable sistema educa¬tivo y además quedarse sin becas y ayudas de comedor”.
Cesar Vidal, La Razón,  26 de abril de 2012.

“Los comunistas andaluces no se diferencian en nada de los comunistas manchegos o asturianos o madrileños. Llevan en sus entrañas el odio al que triunfa, al que trabaja, al que emerge de la mediocridad. Quieren los campos ajenos e implantar en Andalucía planes quinquenales. Y no lo dicen, porque estaría feo, pero alguno sueña con repetir las experiencias de la Brigada del Amanecer. Y aún así, con el Frente Popular en la cresta, Sevilla baila, y ríe y canta”.
Alfonso Ussía, La Razón, 26 de abril de 2012.

2 comentarios:

Melastregues dijo...

Estos mismos son los que dicen que la apología del terrorismo es delito. Bueno, pues aquí hacen añología del racismo y apología del golpismo.
Y se quedan tan anchos.
Y se fuman una faria...
a
nuestra
salud
.

Josefo el Apóstata dijo...

Vaya pareja de miserables.

Según un estudio de la SEMFyC (Sociedad Epañola de Medicina Familiar y Comunitaria) del 2009 realizado sobre una población de 900.000 habitantes de la Comunidad de Madrid con un 20% de extranjeros, el consumo de recursos sanitarios de estos es muy inferior al de los madrileños. En farmacia consumen 5 veces menos, en consultas y pruebas un huevo menos, en ingresos de hospital la yema del otro huevo menos, además cuando ingresan cuestan menos que los ingresos de los indígenas, a urgencias también van menos, etc...
Sólo hay una prestación que usan más que los autóctonos: La maternidad.