domingo, 20 de septiembre de 2015

El apasionante pleito sobre la existencia jurídica de la Virgen

 
Como ya sabéis, el año pasado el meapilas del Ministro del Interior (obtuvo esta cartera por la gran riqueza espiritual "interior" de Jorge Fernández) condecoró a la Virgen María Santísima del Amor con la medalla al mérito policial. Este hecho y la Ley Mordaza serán por lo que este señor será recordado, menudo curriculum. Pues bien, Europa Laica y el Movimiento hacia un Estado laico (MUHEL) denunciaron este asunto ante el juzgado. La Magistrada elevó este juicio a la Audiencia Nacional porque la Virgen no es funcionaria, cosa que reconoció el propio Ministerio. Más tranquilos nos quedamos, porque que se sepa la Virgen no ha aprobado oposición alguna.
A estas alturas el alto Tribunal ya debería haber fallado (fallado en sentido jurídico, no en el sentido de equivocarse, cosa que también hacen con frecuencia), pero diversas maniobras dilatorias por parte del Ministerio por un lado, y la presumible pereza que deben tener los magistrados con este caso por otro, han llevado  a retrasar dicho fallo. Apuestas a que saldrá pasadas las elecciones generales...

En A N T I C L E R C A L nos estamos partiendo el culo de risa con este asunto. Que la Audiencia Nacional se esté pensando tanto tiempo si la Virgen tiene naturaleza jurídica es para reirse por no llorar. Merce la pena leer el artículo completo de Europa Laica.

4 comentarios:

Kassiopea. dijo...

Los juicios cuestan dinero. ¿Quién va a pagar las costas la virgen o San José?
Que se gasten el dinero público en esto es pa sacar las guillotinas.

Unknown dijo...

Pozí

Juan Moreu dijo...

En este país la iglesia, el ministro del interior y el ejército (pilares fundamentales del régimen) entrenan a ver quien es más tonto. Como cuando arrestaban a un mulo por haber matado a un soldado de tamaña coz. Y duran...y duran...

Juan Moreu dijo...

En este país la iglesia, el ministro del interior y el ejército (pilares fundamentales del régimen) entrenan a ver quien es más tonto. Como cuando arrestaban a un mulo por haber matado a un soldado de tamaña coz. Y duran...y duran...