Según el Correio da Manha que, traducido, para los que no sepáis portugués quiere decir "El correo de la maña", un cura de un pueblo del norte de Portugal fue detenido el domingo después de la misa que acababa de celebrar, por poseer armas ilegalmente.
El padre Fernando Guerra, de 74 años, acababa de terminar la misa en Covas do Barroso, un pueblo cercano a Vila Real, cuando llegaron a la iglesia varios gendarmes, en medio del estupor de los fieles,
Y es que no se dan cuenta de lo peligroso que se está poniendo decir misa. Ya jubilao, el hombre, tendría que estar pescando y le vienen ahora con que su parroquia tiene que pagar indemnizaciones a los monaguillos por pederastia, y la diócesis, como casi todas las norteamericanas se ha declarado en bancarrota pá no pagar, pero los lusos, son muy suyos y muy chulos y le dicen "o pagas, o te damos de ostias", que ya muchas has dao tu y te partimos las piernas, cacho borde, que en portugués es un insulto muy, muy malo y entonces dice la misa con un Winchester del 73 y el sacristán se parapeta detrás del piano con una Magnun del 45 y si alguno se cantea, se arma un San Valentín, una balasera. Total: detenidos, fieles estuporosos, gendarmes a la caza y el obispo comprando en el mercado negro un misil tierra-aire. ¡Miá tú pá qué lo querrá!
2 comentarios:
paa curas los de antes. Este haciendo honor a su apellido...
Así me gusta Morgan, atento a la que salta. Y si hay que subscribirse al "Correo de la Maña" pues se subscribe uno.
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