La curia romana y sus delegados se han limitado a condenar estos delitos de abusos a menores perpetrados por curas católicos en EEUU, Irlanda, Alemania y lo que queda por destapar... Pués no es suficiente, señores purpurados. No es suficiente con condenar y reprobar estos delitos, como si sus santidades no hubieran tenido nada que ver. Como cómplices, al menos de encubrimiento, algo más tendrían que decir.
Hans Küng (catedrático de Teología de una universidad alemana) lo pide en este artículo publicado hoy por El País. Además de vincular el celibato a la pederastia, como un factor causante más, pide al Papa y a sus obispos que entonen el mea culpa. Hasta ahora ningún obispo a confesado su complicidad con el terrorismo sexual de algunos (no pocos) curas católicos. Todavía el Obispo de Tenerife (el de la foto es un primo suyo) no se ha disculpado siquiera por esa justificación bochornosa de la pederastia de sus colegas.
1 comentario:
A mi me la suda que pidan perdón, que les resulta fácil y bien cómodo. Lo que tienen que hacer es mandar a la justicia ordinaria a tosa esa banda de pederastas (cosa que no harán nunca). Lo suyo es muy simpático, exijo legislación contra el aborto, el divorcio, etc. pero me reservo el derecho de justicia eclesiástica para los casos de pederastia dentro de la iglesia.
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