viernes, 8 de abril de 2011

El Tribunal Constitucional falla a favor de la virgen

La sentencia avala que un colegio aconfesional tenga patrona
El Tribunal Constitucional ha desestimado la petición de amparo del abogado sevillano José Antonio Bosch Valero contra la vulneración de su derecho a la libertad religiosa que aseguraba sufrir por estar obligado a pertenecer al Colegio de Abogados de Sevilla, cuyos estatutos subrayan su carácter "aconfesional" al tiempo que consideran a la "Santísima Virgen María en el Misterio de su Concepción Inmaculada" como su patrona
El Constitucional considera en su sentencia del pasado 28 de marzo que el perfil histórico del patronazgo de la Inmaculada y los actos que la institución colegial celebra y patrocina en su nombre están -"la concepción comúnmente aceptada"- por encima de las valoraciones individuales. Para el Constitucional, la tradición blinda los símbolos católicos frente a los cambios.
Tras marcar la corriente argumental, el Constitucional compara esa protección con el descanso de los domingos y otros muchos "emblemas, escudos, banderas, himnos, alegorías, divisas, lemas y conmemoraciones. Esta es la razón por la que símbolos y atributos propios del cristianismo figuran insertos en nuestro escudo nacional, en las banderas de varias comunidades autónomas y de numerosas provincias, ciudades y poblaciones" que en su origen eran propios de confesiones cristianas. "Cuando una tradición religiosa se encuentra integrada en el tejido social de un determinado colectivo, no cabe sostener que a través de ella los poderes públicos puedan transmitir un respaldo o adherencia a postulados religiosos", incluye la sentencia en uno de sus argumentos jurídicos.
El Constitucional invoca en su sentencia la resolución del pasado 18 de marzo del tribunal de Estrasburgo sobre la presencia de crucifijos en las escuelas públicas italianas, en la que sostuvo que "la percepción subjetiva del reclamante no basta por sí sola para caracterizar una violación del derecho invocado".
El presidente del Colegio de Abogados de Sevilla, José Joaquín Gallardo, primero se congratuló de la sentencia para posteriormente unirse a sus argumentaciones históricas, aunque procuró incluir en estas un perfil católico. "La sentencia es respetuosa con la tradición cristiana de buena parte de la sociedad española", destacó. Gallardo puso especial énfasis en que el colegio había sido creado "como cofradía para socorrer a los abogados más necesitados y darles sepultura cuando fallecían",
Bosch Valero consideraba que en la sentencia de la Sala Segundo del Constitucional, "había mucho de ideología por parte de sus señorías".

1 comentario:

azotacuras dijo...

Creo que la única vez que he ganado algo en este vida fue una votación para quitar de los Estatutos de mi corporación el artículo relativo a que estabamos bajo la advocación de la Virgen del Buen Consejo, a la que nombrábamos nuestra patrona. Por contra no he conseguido nunca que deje de celebrarse la fiesta anual con una Misa, ni creo que lo logre ya, porque cada vez me encuentro más viejo y con menos ganas de algunas batallas.