Otras simpáticas declaciones...

Os presento a Monseñor Giampaolo Crepaldi, otro idiota (Lisis, ya sé que habría que calificarlo con algún adjetivo más contundente, pero es que “idiota” ya lo tenemos adoptado como un signo de identidad de nuestro cuaderno). Giampaolo es, según OADIR, el arzobispo de Trento y el obispo de Trieste. No sé si OADIR está muy empanao, o son dos cargos compatibles.
Este idiota ha dicho recientemente: “No temería afirmar que el principal problema de la humanidad hoy es la falta de libertad religiosa en el mundo”. Toma del frasco, Carrasco! Esto es como lo del chiste de la pija: Una pija se encuentra con una conocida y le oye cómo se queja angustiada que es muy desgraciada, que se acaba de divorciar, que la han despedido del curro y le acaban de diagnosticar un cáncer, y la pija, haciendo un alarde empatía le dice: no sabes cómo te comprendo, a mí se me acaba de romper una uña, jaté. ¿No os recuerda esto de Giampaolo a las declaraciones del padre Munilla? Por cierto, muy bueno el post de Isaak sobre el bicho éste.
Bueno, pues este obispillo de Trieste o de Trento, también soltó esta otra perlita a propósito la celebración de la promulgación de los Derechos Humanos de 1948: “Los derechos humanos se fundan en Dios, que es la fuente de todos los derechos. Los derechos humanos no nacen del consenso humano. Son una gramática cuyas reglas no hemos inventado nosotros, sino que nacen de Dios, no son una palabra humana. Así se garantiza su valor contra toda forma de arbitrio”. Y se quedó tan ancho. Ya no les basta con los 10 mandamientos, ahora resulta que los derechos humanos son el catecismo. Esto, dicho por un obispo, ya no es un problema de ignorancia (supongo que además de teología algo habrá estudiado de historia y de filosofía), se trata sencillamente de una falta de respeto a la inteligencia de cualquier persona y de una agresión, de un insulto para los no creyentes.