Gadafi, vestido de General Tapioca, lleva del brazo a Berlusconi, tan elegante como siempre, con esa sonrisa de implantes y ese pelo peinado a la brea. Se les ve en un clima de confianza familiar, de buen rollito. Tú me vigilas a los subsajarianos (los caneas y los deportas) para que no me molesten y yo ya invertiré unos buenos eurakos en Libia y te haré buenos regalos...
Gadafi, para no ser menos payaso que su anfitrión, ha convocado, a través de una agencia de modelos y azafatas, a 700 chicas italianas a dos actos de islamización de la mujer europea. Los actos han consistido en repartir libros del Corán y entre 60 y 80 euros a cada una, según las fuentes consultadas. "Convertíos a la religión verdadera", las exhortó. "En Libia se respeta más a la mujer que en Occidente o en Estados Unidos".
Dios los cria y ellos se juntan.
1 comentario:
No sé si llamarlos, exactamente, payasos. Payasas, éso sí, los centenares de peseteras que acuden a dejarse humillar por este par de impresentables por unos módicos 80 euros, tirando por lo alto.
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