Es una especie de Lourdes pero en los Balcanes: calcao macho, tres niños, la virgen y los mensajes. Y el detalle ibérico, las tropas de los lejías españoles, cabra incluida, tuvieron una base por allí cerca; a ellos no se les apareció, pero entre hierbas fumables, alguno cuenta que oyó músicas celestiales en los ronquidos de un compañero. Además, una escritora llamada Vallejo-Nájera, que seguro es familia del ilustre psiquiatra ha puesto su conversión en Youtube, no tengo acceso desde aquí, si merece la pena, lo mismo lo podríais colgar.
Como no tenemos presupuesto para viajar tan lejos hemos mandado al corresponsal de Alba y Omega que nos dice lo siguiente "la cultura aparicionista en España crea rechazo, sin embargo, la Virgen María ha estado presente entre nosotros muchísimas veces". Muy puesto no estoy en culturas aparicionistas, pero pá mi que lo que crea es afición, había una mujer en la dura estepa castellana, de cuyo nombre no me acuerdo que se hizo rica con el rollo éste y las caras de Belmez, ¡vaya tela!, aunque no sé si tenían que ver con la virgen. En San Viator, debíamos de ser muy listos porque nos decían "a todos los tontos se les aparece la virgen" y, que yo sepa, no se nos apareció a dinguno.
2 comentarios:
A mi una vez, en las fiestas de Sabiñánigo (bonito pueblo de la provincia de Huesca) se me apareció la Virgen. Lo juro por mi honor (o por lo que sea)
La que se te apareció esa noche de fistas y alcohol de garrafa no era la Virgen, era la Cantudo, que soñaste con ella de tanto gritarle a Manolo Otero (que actuaba esa noche y entonces era pareja de la susodicha): ¡Otero: enséñanos el felpudooo de la Cantudooo!
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