S.S.

S. Sostres vuelve a la carga con unas polémicas declaraciones en su blog de El Mundo. El periodista habla sobre las acusaciones vertidas sobre Dominique Strauss-Kahn, director gerente del Fondo Monetario Internacional, que ha sido acusado de abusar de una camarera de hotel.
Los hombres solos a los que se les presume cierto poder adquisitivo son como golosinas para algunas camareras comenta Sostres refiriéndose al caso del director del FMI. Para Sostres, las culpables son esas mujeres que intentan abusar de ciertos empresarios ofreciéndoles sexo a cambio de dinero.
S. expone el caso justificando a aquel hombre que cede a los encantos de las trabajadoras de hotel y asegura que son éstas las que suelen chantajear a los empresarios para sacar provecho de su posición, ya sea manteniendo sexo de pago o, si estos rechazan pagar, recurriendo al chantaje o acusándolos de violación y abuso, como le ha ocurrido a Dominique Strauss-Kahn.
S. no defiende a DSK pero si deja entrever que éste cumple con los requisitos que suelen buscar estas 'camareras' para hacerles caer en su trampa.

No hace falta estar "preñado de psicología" para interpretar las declaraciones del gilipollas de S.S. (gilipollas del año, según Twiter): jamás una mujer ha abusado de él; la masturbación, en la adolescencia está muy bien pero, a partir de cierta edad forma un bucle en las neuronas y el cerebro se "cuelga", como en las computadoras.

El abuso de posición dominante está tipificado en el código penal, no sé si como delito o como falta, justificar a un individuo de la calaña del director del FMI significa exculpar su comportamiento y por tanto complicidad.

Por cierto, SS, las camareras, las trabajadoras del sexo y las chantajistas son personas.