HAY GENTE MUY PETARDA

Qué hambre deben pasar algunos artistas para tener que perder el tiempo (y ganar adeptos) cantando una letra tipo Pemán para la música de la marcha real. La letra es patética y la referencia a dios, insuperable. Todo ello lleva al paroxismo de un auditorio que rompe a aplaudir hasta que le sangran las manos:

Vuelvo a casa, a mi amada tierra,
la que vio nacer un corazón aquí.
Hoy te canto, para decirte cuanto orgullo hay en mi,
por eso resistí.
Crece mi amor cada vez que me voy,
pero no olvides que sin ti no se vivir.
Rojo, amarillo, colores que brillan en mi corazón
y no pido perdón.
Grande España, a Dios le doy las gracias por nacer aquí,
honrarte hasta el fin.
Como tu hija llevaré ese honor,
llenar cada rincón con tus rayos de sol.
Y si algún día no puedo volver,
guárdame un sitio para descansar al fin.”

Antiklerical, propone una letra alternativa que se puede cantar (incluso) a ritmo rap.

Cago en casa, en mi amado inodoro,
que me ve el trasero cada amanecer.
Hoy te canto para decirte cuánto orgullo hay en mi,
por eso resistí.
Crece mi amor cada vez que me voy,
pero no olvides que si ti no se vivir.
Blanco, marrón, colores que brillan en mi corazón
y no pido perdón.
Grande inodoro, a Roca doy las gracias por cagar aquí,
honrarte hasta el fin.
Como tu hijo llevaré ese honor,
llenar cada rincón con tus rayos de sol.
Y si algún día no puedo volver,
guárdame un sitio para descansar al fin.