Una nueva oportunidad perdida para que la Iglesia española se desmarque con claridad del discurso de odio promovido por la extrema derecha la cuestión migratoria. Y es que el obispo de Cartagena-Murcia, José Manuel Lorca Planes, ha salido al paso para enmendar la plana de su propia delegación de Migraciones, que criticó cómo VOX y PP de la región “están normalizando, con mucha osadía y total impunidad, peligrosos idearios” que “legitiman discursos de odio” contra los inmigrantes.
Lejos de avalar a sus responsables diocesanos, Lorca Planes ha dado marcha atrás tras las duras críticas recibidas por VOX, y ha emitido su propio comunicado en el que considera “un error señalar a personas o instituciones como causantes de este problema, ya que es responsabilidad de todos los ciudadanos y de todas las instituciones”.
En su comunicado, la delegación recordaba cómo el pasado 6 de septiembre, el líder de VOX en Murcia, José Ángel Antelo, realizaba “unas calumniosas declaraciones para diversos medios de comunicación vinculando inmigración con inseguridad ciudadana, señalando a la población inmigrante como responsable del deterioro de nuestras ciudades y pueblos”. Al tiempo, lamentaba cómo tres días después, senadores y diputados del PP fomentaban lo que dieron en llamar el ‘efecto llamada’ ante la inmigración. “La inexactitud de esta afirmación fortalece las falacias defendidas en los discursos de odio contra los inmigrantes, y revela su clara y única intencionalidad de obtener rédito político con ellas”, denunciaba la delegación de Migraciones, que advertía de que “las prácticas institucionales están haciendo muy difícil la vida de las personas migrantes y refugiadas”, denunciando la “dificultad en la obtención de cita en oficinas de extranjería para peticiones de asilo y residencia; ocupación de los puestos de trabajo más precarios y peor pagados; accidentes laborales con resultado de muerte de trabajadores y trabajadoras; redadas racistas; internamiento en CIEs” o las “devoluciones en caliente”.
La respuesta de la ultraderecha no se hizo esperar. Así, en un duro comunicado, VOX responde a la delegación diocesana que son “el único partido que realmente defiende los valores del catolicismo".
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