lunes, 23 de noviembre de 2020

NUBARRONES EN EL CEREBRO DE REIG PLA


Tomado de infovaticana.com

El obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, presidió ayer, en el Cementerio de los Mártires de Paracuellos, la misa de la Solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo, con ocasión del LXXXIV Aniversario del Martirio de 143 beatos.

Durante la homilía, Reig Pla advirtió de que hoy, “como ocurrió en otros momentos de la historia, se ciernen densos nubarrones sobre España”. Con ello no se refería sólo a la situación “de incertidumbre y de dolor” que ha provocado la pandemia “que nos aflige”.

Unido a ello, “se levantan otras nubes de oscuridad que atentan contra la sacralidad de la vida humana y contra la libertad de los hijos de Dios”. “Son nubes oscuras que pretenden censurar el nombre de Dios y su relevancia en las instituciones y espacios públicos”, explicó.

“Estamos viviendo una crisis institucional, social y económica muy grave que afecta tanto a las personas como a nuestras familias. Al mismo tiempo se presentan propuestas dirigidas a robar la libertad de los padres para la procreación y la educación de sus hijos, leyes que de manera prepotente quieren cercenar la libertad de enseñanza, o que quieren retorcer la naturaleza de la persona negándole su identidad”, señaló Reig Pla.

El obispo de Alcalá afirmó que “asistimos estupefactos a la promoción incluso de una ley de la eutanasia que pretende favorecer el suicidio asistido y el homicidio por parte de los sanitarios corrompiendo así el ejercicio de la medicina”.

Reig citó al Papa Francisco cuando advirtió recientemente “a nuestros gobernantes de la necesidad de no caer en políticas sectarias e ideológicas que acaban deconstruyendo la patria. “Es muy triste, decía, cuando las ideologías se apoderan de la interpretación de una nación, de un país y desfiguran la patria”, leyó el obispo de Alcalá de Henares citando al Pontífice.

Tras la misa se procedió a la exposición mayor del Santísimo y a continuación tuvo lugar una procesión eucarística y la bendición.

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