El pasado lunes, 10 de enero, el nuevo obispo de Almería Antonio Gómez Cantero reunió al clero de la diócesis para hablar sobre asuntos económicos. Cantero estuvo acompañado de un abogado que informaba sobre las normas vigentes de cara a la transparencia institucional. En esa reunión, se explicó que para evitar cualquier irregularidad hay que pedir el DNI a cualquiera que haga una donación y preguntar la procedencia del dinero.
Otro de los temas de la reunión y que tiene que ver con la transparencia fue la adquisición del coche del actual obispo. El propio vicario general reconoció recientemente en una carta al clero de Almería, que el coche del obispo Gómez Cantero es un donativo de unas personas, sin especificar quienes, que “conocedoras de la situación económica de la diócesis, se ofrecieron a comprar el coche y se les agradeció su generoso ofrecimiento”. Infovaticana ha podido confirmar, a través de un documento, que el coche está a nombre del obispo desde el 3 de junio del 2021 y está domiciliado en su ciudad natal, Palencia.
El obispado anunció recientemente, que realizará una auditoría para esclarecer las cuentas de la diócesis en banarrota. Desde entonces, una de las primeras medidas que tiene previsto tomar Gómez Cantero es la de contratar una empresa externa de servicios que se encargue del personal. El día que se reunió Gómez Cantero con una de las empresas candidatas a gestionar el personal de la diócesis, estuvo presente el obispo de Getafe, Ginés García Beltrán, amigo de Cantero y conocido amigo del dueño de la empresa que se ha propuesto.
Gómez Cantero apostó por mantener en sus puestos al ecónomo y el administrador. El ecónomo ya estuvo en ese puesto durante el mandato del obispo emérito. Detrás de ellos, hay que destacar la figura de Eduardo Pomares, que siempre llevó los asuntos económicos relacionados con la Iglesia en España cuando estaba en el Banco Popular y así lo hace hoy desde el Banco Santander. Pomares, además de ser director general de Instituciones religiosas del Banco de Ana María Botín, es miembro del Consejo Económico de la Archidiócesis de Madrid.
Tanto el ecónomo como el administrador, de la mano de Pomares, apostaron por unificar todas las deudas del obispado en una, dando lugar a lo que hoy es el equívoco de la deuda del obispado. Persuadieron al entonces obispo Adolfo González Montes, para que aceptara un nuevo préstamo que Pomares ofrecía de cinco millones de euros.
La negativa de González Montes a aceptar dicho préstamo propició que Pomares junto con el ecónomo y el administrador comenzaran a dar «explicaciones infundadas sobre el endeudamiento de la diócesis. Además, el obispado consiguió la recuperación de un terreno en el municipio de Huércal de Almería para venderlo al propio ayuntamiento, además de una casa antigua en la ciudad de Almería, un local en el municipio de Roquetas de Mar y una casa con una gran parcela en Aguadulce. Todo ello fue paralizado por el nuevo obispo, quien ha pedido financiación a la Conferencia Episcopal y cree que la solución pasa por alquiler el seminario.
1 comentario:
Voy a regalarle una muñeca hinchable a ver si así se le alegra la vida... O mejor un muñeco hinchable, no?
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